En un emotivo acto celebrado en el Complejo Monumentario Antonio Maceo, en la provincia de Artemisa, fue abanderada la delegación cubana que representará a la Isla en la Segunda Edición de los Juegos Panamericanos Junior de Asunción, Paraguay, evento que se desarrollará del 9 al 23 de agosto de 2025.
La ceremonia estuvo presidida por la vice primera ministra Inés María Chapman y el pentacampeón olímpico Mijaín López, quienes entregaron la enseña nacional a los jóvenes deportistas, reafirmando la confianza y el compromiso histórico del deporte cubano.
Para la ceremonia fueron seleccionados como abanderados la luchadora Yainelis Sanz —oro en lucha libre en Cali 2021— y el remero Roberto Carlos Paz, dos figuras que simbolizan la mezcla de experiencia y relevo generacional de la escuadra nacional.
Composición
La delegación cubana está compuesta por 231 atletas (117 hombres y 113 mujeres), quienes participarán en 28 deportes, consolidando a Cuba como una de las representaciones más numerosas de la región junto a México, Brasil y el país anfitrión. El grupo se caracteriza por su diversidad, con integrantes de todas las provincias y provenientes de 72 municipios, llevando la representación del deporte nacional a todos los rincones del país.
La comitiva juvenil tiene un promedio de edad de 18 años y sus integrantes han sido formados en las escuelas nacionales de alto rendimiento y acuden con la misión de superar el quinto lugar obtenido en la edición inaugural de Cali 2021, así como asegurar nuevas plazas rumbo a los próximos Juegos Panamericanos de Lima 2027.
Propósitos
Los especialistas destacan entre las disciplinas con mayores expectativas para obtener medallas el atletismo, la lucha, el judo, las pesas, el canotaje y el remo. El objetivo fundamental de este equipo es ganar experiencia en eventos internacionales, garantizar la transición competitiva hacia citas mayores y elevar el prestigio del deporte cubano en el continente.
Cuba viaja a Asunción con el lema “Con amor por Cuba”, defendiendo la tradición, la entrega y el ímpetu de las nuevas generaciones del deporte insular, con la frente en alto y el corazón puesto en cada competencia.