Yunier Mendoza consiguió otra marca en el beisbol cubano que confirma las dotes excepcionales que posee como bateador, al llegar a los 300 dobletes.
El batazo lo conectó en la tarde del 15 de noviembre del 2020 en el estadio Augusto César Sandino, donde en la novena entrada puso la esférica en lo profundo del jardín derecho, ante un lanzamiento del relevista derecho Raidel Alfonso.
Las tres centenas las redondeó con 40 años, en el juego 1685 de su temporada 22, y el turno oficial al bate 6460, con el detalle que fue el jit 2mil 90. De esa forma se convirtió en el jugador 31 y el noveno zurdo que arriba a la marca.
Por los pazos de los líderes
Los primeros en este departamento son Michel Enríquez (437), Ariel Borrero (412) y Rolando Merino (405), con el espirituano Frederic Cepeda (394) de cuarto y en camino de ser parte del exclusivo club de los 400.
Los demás peloteros nacidos en Sancti Spíritus que han dado 300 o más batazos de dos bases son Lurdes Gurriel, Yulieski Gurriel y Eriel Sánchez, quienes terminaron sus carreras en series nacionales empatados en el puesto 17 con 327.
Al comenzar el torneo Mendoza necesitaba once dobletes, lo cual realizó en el partido 40 de los Gallos, por lo que debe superar los 14 que promedia por serie, e incluso tiene una proyección que lo ubica en el rango de la veintena, teniendo en cuenta que restan 35 desafíos más en el calendario regular.
El récord personal de Mendoza data de la serie 42, cuando soltó 24 tubeyes en los 90 juegos del calendario regular. Ocho temporadas después produjo 23 en 88 encuentros y la tercera mayor cantidad (21) la estampó en la serie 48, en la que vio acción en 84 choques. Muy cerca de los veinte dobletes finalizó en el torneo 51 (18 en 72 partidos); mientras que con 17 terminó las campañas 44 (82 JJ) y 52 (81 JJ).
El primer doblete del inicialista de los Gallos ocurrió el 8 de febrero del 2000 en el Huelga y a costa del zurdo de Cienfuegos Yosvani Perez, en el quinto inning.
Mis apuntes
De acuerdo con mis archivos personales, y luego de varias horas de hurgar en un mar de números, encontré que el centenar de dobletes lo vivió contra el extinto equipo de La Habana, el 19 de enero del 2006 y en el estadio 26 de Julio de Artemisa, en jornada en la que también pegó el 99, en cinco turnos. En ese partido el lamentablemente desaparecido Yadiel Pedroso ganó 5×3, con labor de ocho entradas en las que aceptó cuatro imparables, incluido un vuelacercas solitario de Yulieski Gurriel. El noveno lo tiró José Ángel García, a quién le dieron tres cohetes.
El tubey doscientos Mendoza lo disparó el 3 de diciembre del 2011, en la serie 51, frente al diestro Osmani Tamayo de Santiago de Cuba, en el principal estadio de Sancti Spíritus. Allí mismo y por coincidencias, despachó el jit mil que fue una conexión de dos bases, en la noche del 16 de abril del 2009, en choque de la serie 48 y ante el zurdo matancero Miguel Rodríguez Ibazeta.
Otro momento histórico en la vida de Mendoza se produjo en la tarde del 26 de agosto del 2019 y donde más ha jugado, al pegar el segundo millar de imparable, el cual fue cuadrangular frente a un lanzamiento del derecho de Mayabeque Yadian Martínez.
Para ser parte del club de los 2 mil jits y 300 dobletes, Mendoza ha sacado máximo provecho al tacto que posee. Prueba de ello es que en estos momentos acumula solo 472 ponches, o lo que es igual falla por la vía de los strike cada casi 4 juegos. (3.56) y 13.6 veces al bate.
La próxima cifra cerrada a la que podría aspirar son las 1000 carreras anotadas. Para ello requiere pisar el home 45 veces más, lo que se vislumbra no suceda en la temporada 60 aunque, con la actual estructura de 75 juegos y la buena forma deportiva del trinitario, debe concretarlo antes de que el rendimiento ponga fin a la carrera deportiva.