El Tour de Francia, la cita más importante del ciclismo mundial, arrancará mañana su edición 112 en la localidad francesa de Lille.
Los organizadores del certamen galo crearon un recorrido dividido en dos partes muy distintas y perfectamente diferenciadas.
En la primera mitad abundarán las etapas de colinas cortas y muros, como se conoce popularmente a las subidas extremadamente empinadas. Ante tal panorama, los llamados a dar espectáculo serán los corredores explosivos con gran potencia para subidas.
En total contraste, la segunda parte del Tour estará colmada de alta montaña… Este bloque final llevará a los pedalistas por Hautacam, Mont Ventoux y el célebre Col de la Loze. Cada una de estas montañas tiene un lugar especial en la memoria del esloveno Tadej Pogacar, ya que en ellas mostró su versión más frágil.
La mesa está servida para que inicie una novedosa edición del Tour de Francia, que se extenderá hasta el próximo 27 de julio.